Desde México y el Bronx
El arte que construyen a través de su voz y la música, narran el momento histórico que vivimos y sus ritmos se convierten en himnos, es una resignificación casi mágica.
Conocí a Audry Funk como a muchas otras personas durante 2020: en una sesión de zoom y desde entonces me declaro fan. Su música me acompañó en los meses de pandemia; las mezclas de rap, hip hop y reguetón son mi soundtrack para las caminatas diarias, incluso mis hijos son seguidores. El más pequeño ha declarado que: “Te pertenece” es su ritmo favorito y, he de confesar que uno de los momentos más incómodos que he vivido con él, fue cuando me cuestionó mientras bailaba:
-Mami: ¿qué significa verga?
Y claro, le expliqué que es la base de una vela de un barco.
El domingo 14 de noviembre por fin pude abrazar a mi amiga artista, así la llaman mis niños. Acudí al concierto que ofreció junto con Renee Goust y es por mucho, la mejor opción que pude elegir para regresar a los eventos públicos.
En una terraza en el centro de la Ciudad de México, (según mis cálculos) trescientas personas nos reunimos para escuchar a estas dos grandes cantautoras. Llegué con mi grupo de amigas, habíamos analizado el…
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