¡Arriba los malvados!
Los autócratas y populistas no tienen que preocuparse de sanciones de occidente. Cualquier recurso que Estados Unidos o Europa retire, puede ser reemplazado por dinero de China, Arabia Saudita o Rusia
No solamente en México vivimos (algunos dirían que sufrimos) la llegada al poder de un malvado, ya sea un populista, un autócrata o un dictador. Es un fenómeno mundial. En el continente americano tenemos a Donald Trump en Estados Unidos, que bien puede reelegirse en el 2024; a Jair Bolsonaro, en Brasil; a Pedro Castillo en Perú. A los autócratas Nicolás Maduro en Venezuela y Daniel Ortega en Nicaragua. También está Nayib Buekle en El Salvador. En Gran Bretaña tienen a Boris Johnson. Y en Europa está Lukashenko en Bielorrusia. Hay otros malvados en el poder, como Putin en Rusia; Erdogan en Turquía… La lista es interminable. A ella podríamos agregar la amenaza de que la extrema derecha de Éric Zemmour en Francia llegue a desbancar a Macron en abril del 2022.
¡Arriba los malvados!
En The Atlantic, escribió la periodista e historiadora Anne Aplebaum, hemos pasado de un mundo en el siglo XX que derrotó al nazismo; comunismo y fascismo a uno actualmente en el que las democracias se desmoronan.
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