En Chiapas hay un pueblo que no le teme al COVID
En Aldama no temen a la enfermedad, les temen a los ataques de los grupos armados de Chenalhó.
Se llama Aldama y está ubicado en la zona indígena tsotsil del estado de Chiapas. No es un lugar turístico o emblemático, su nombre ni siquiera se podría guardar en la memoria de las letanías que algunos maestros hacen recitar a alumnos de educación básica, obligados a repetir la lista de los municipios de su entidad.
Aldama, sin embargo, alberga a mujeres tejedoras que reproducen en sus prendas los símbolos de la vida, de la creación y del universo. Con hilos de colores van formando rombos que simbolizan los cuatro puntos cardinales, pero que sí es un rombo dentro de otro representa al “ojo de Dios”; hilada tras hilada construyen grecas que semejan los truenos de la lluvia que da la vida o figuras de ranas y monos escrupulosa y simétricamente entrelazados. Las mujeres de Aldama producen algunos de los más significativos bordados de esta tierra al sur de México.
Aldama es una tierra de cafetales, de ríos, de maíz y de vida. Acá la población puede producir su propio alime…
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