¿Y si en vez de Kerry llegaran los soldados?
A todo eso se suma un importante despliegue de la propaganda rusa en México y en general en América Latina.
El respeto a la soberanía es probablemente el punto más sensible en las relaciones entre México y los Estados Unidos. Muchas generaciones de políticos y estadistas mexicanos se han esforzado en marcar claramente cuáles son las líneas rojas en sus contactos con el gran vecino del norte. La política exterior mexicana se ha forjado defendiendo el multilateralismo y el principio constitucional de la no intervención como contrapeso a las tendencias expansionistas de los Estados Unidos. México es un país soberano, como en múltiples ocasiones subraya hasta el cansancio el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador.
Por eso, cuando escucho el argumento de que “la soberanía de países vecinos de una potencia es siempre relativa” para justificar la política expansionista de Rusia hacia Ucrania me quedo algo pensativa. Recientemente este argumento ha aparecido por ejemplo en la cuenta de Twitter de Lorenzo Meyer, exprofesor del El Colegio de México, quien sin duda tiene razón refi…
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