El poder de hacer bien las cosas
Se da por hecho, pero, ¿qué pasaría si cada quien hiciera con pasión y excelencia lo que le toca?
Esta semana viajé un par de días con una amiga que está trabajando para convertir una idea en una empresa. Tiene en mente crear un negocio a largo plazo, formal y que genere impacto en su sector. Es una buena oportunidad empresarial y sé, en los años que tengo de conocerla, que tiene todo el talento para conseguir cualquier cosa que se proponga.
Esos días de viaje con ella descubrí que, en su vida en general, la distingue una cualidad: le gusta hacer las cosas bien. Si le pides guardar un secreto lo hace a cabalidad. Si le pides que te ayude con la revisión de algún archivo financiero (su área de especialidad) lo hace como si le pagaras y no como si te estuviera haciendo un favor. Si organiza un evento se encarga de principio a fin de que todo pase con excelencia.
Verla en acción me hizo reconocer que muchas veces asumimos que estamos haciendo las cosas bien simplemente porque estamos capacitados o porque somos nosotros quienes hacemos lo que hacemos, pero no revisamos …
Keep reading with a 7-day free trial
Subscribe to OPINIÓN 51 to keep reading this post and get 7 days of free access to the full post archives.