Del narcisismo al humanismo
El problema es que en este mundo hemos normalizado que familia sea cualquier cosa que exista a pesar de que no hay amor en ella.
Ama y haz lo que quieras. Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor; si perdonas, perdonarás con amor.
Hace más de una década viajé a Israel por trabajo y cuando aterricé era una atea irredenta y cuando volví era una persona convertida al catolicismo que quería regresar a prepararse para ser catequista después de enamorarse de lo que conoció. Me explico.
Viviendo en ese lugar del mundo se gestó en mí un cambio tan avasallador que encontré en la figura de Cristo algo que me modificó para siempre. Aprendí en una experiencia tan personal e íntima lo que Jesús quería mostrarle a la gente: compasión y un amor que no podía medirse con la métrica humana y que tampoco podía contenerse en el cuerpo.
Recuerdo haber convivido allá con mucha gente que creía en Dios y un día, caminando por la mitad de un cementerio, me encontré bajo un árbol de mostaza y le pedí a ese ser Todopoderoso que si existía me diera una señal, pues yo también q…
Keep reading with a 7-day free trial
Subscribe to OPINIÓN 51 to keep reading this post and get 7 days of free access to the full post archives.