El poder de cambiar de opinión
Cuando me he aferrado a algo, sin escuchar más opiniones, he pagado un precio muy caro.
Cuando era adolescente, creía que tener una opinión y vivir en congruencia con ella, daba fuerza y sobre todo, construía y compartía tu identidad. Decir que te gustaba X cosa, te hacía pertenecer y por lo mismo formar parte de algo más grande. Las opiniones claro que nos suman o restan en la vida de muchas maneras. Por ello, para mí siempre fue parte importante de mi vida tenerlas y sobre todo, abrazarlas fuerte.
En mi familia la congruencia, es decir este súper poder de pensar, sentir, decir y actuar en la misma dirección siempre fue súper importante. Mi papá nos inculcó, a través de sus acciones, que cuando no compartía alguna postura con alguna empresa, dejaba de consumirlos de forma radical, porque no podíamos caer en ese juego. Me dejaba claro que una vez que uno se subía a un barco con una opinión, uno la defendía.
En su época, eso fue lo que hizo que el movimiento del 68 fuera algo importante. Tenías que aferrarte a ideales para poder transformar la realidad. Se tenía …
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