–¿Cómo te pagamos la nota que nos escribiste el último mes? ¿Me podrías dar tu número de cuenta?
Esto me contestó hace 20 años Roberto Morán, por esos tiempos editor general de la revista Expansión cuando le mandé un reportaje desde mi Córdoba natal sobre que era el “corralito bancario” y cómo operaban las empresas mexicanas en un país sin moneda corriente.
–Sin dudas no quedó clara mi nota: no hay bancos abiertos, no hay manera de acceder a las cuentas que tenemos ni al dinero que estaba o que lleguen allí. ¿Me podrías enviar el pago por Western Union?
–No, tampoco, porque ellos no tienen acceso a efectivo para poder pagarte. Pero ganamos la licitación de la revista in fly de Mexicana de Aviación y te puedo enviar un boleto para que vengas a México y cobres tu trabajo en efectivo.
Y aterricé en el DF en medio de la peor crisis económica de Argentina, la de 2002; cobré 300 dólares, que eran una millonada en (invisibles) pesos y me permitían pagar muchas deudas si me ap…
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